top of page
Buscar
  • Foto del escritorAlvaro H. Muñoz M.

El sentido de la vida...


Carlos llegó a consulta porque no encontraba sentido en la vida; con tan solo 19 años no se sentía motivado con prácticamente nada.  Estaba medicado por su psiquiatra y había dejado de montar tabla que era lo que más le gustaba hacer con sus amigos.  En el fondo de su mirada vidriosa y opaca aún no se podía distinguir claramente al ser humano que quería recuperar su vida... le di la instrucción de seguir normalmente con su tratamiento psiquiátrico y simultáneamente Iniciamos un proceso conjunto de apoyo con un médico alternativo para lo físico y conmigo lo emocional usando Metodología AONC.  

Hicimos tres sesiones: en cada una Carlos iba sintiendo mejoría; pero lo más impactante vino cuando en la tercera sesión él logró recuperar y neutralizar un recuerdo de una edad muy temprana: siendo solo un niño de talvez 7 u 8 años, tuvo que presenciar por circunstancias de la vida de camino a su escuela, el trágico escenario de la muerte de un hombre en la calle... en su cerebro quedó impresa la imagen del hombre tendido en el suelo y la gente al rededor murmurando lo débil y efímera que puede ser la vida.

Esta información impresionó profundamente el cerebro del niño que durante años estuvo "cocinándola" de manera inconsciente y que de pronto sin haber un motivo aparente, o un detonador específico surge en forma de cuestionamientos sobre el sentido de la vida y su duración.

Al observar ese recuerdo en la pantalla mental simultáneamente con su manifestación corporal e ir liberando poco a poco esa energía, el cerebro de Carlos es capaz de observar el recuerdo neutralmente y liberar la energía requerida por el conflicto para tareas creativas.

Luego de esa sesión Carlos no volvió a pedir sesiones; como dos semanas después le hice una llamada de seguimiento para ver cómo seguía; su respuesta fué " SUPER BIEN!!!; ESTOY MUY CONECTADO, ¡YA ESTOY MONTANDO TABLA DE NUEVO!!!"

Solo unas pocas semanas pasaron desde su tercera sesión y nos enteramos por su familia que Carlos se había ganado una beca para ir a otro país a estudiar una especialización de la carrera que seguía.  

Tuve la oportunidad de encontrármelo con su familia posteriormente en un centro comercial de la ciudad, y precisamente estaban haciendo las compras para su viaje; su mirada era otra... ahora sí se veía en ese cuerpo el verdadero ser que lo habitaba... sentí (y aún lo siento mientras escribo estas líneas) una gran emoción en mi corazón; como de regocijo por esa vida que se encaminaba ahora a un nuevo destino.

Pero la historia no para aquí; Carlos no solo estuvo estudiando en el exterior sino que a su regreso completó su carrera y ha comenzado a trabajar en una reconocida agencia de publicidad; hace poco compartió a través de sus redes sociales el reconocimiento que recibió por su más reciente proyecto, el diseño de la nueva imagen corporativa para un importante banco de nuestro país.

Me siento muy agradecido de haber podido hacer parte de la vida de Carlos y de saber de sus triunfos; pero más que todo de saber que se está dirigiendo hacia su felicidad.

14 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo
bottom of page